¡Qué mayor tragedia que enamorarse de alguien que está
muy lejos? Eso le sucedió a Ranino que se había enamorado de la Luna. Noche
tras noche croaba desesperadamente intentando que le oyera su enamorada. Mas
nadie le contestaba.
Poco a poco, Ranino iba languideciendo y sus vecinos
se irritaban cada vez más pues Ranino no dejaba dormir a nadie. Como vieron que
sus protestas no servían de nada, empezaron todos a croar al mismo tiempo en
respuesta a los cantos de amor de Ranino.
Ranino, el fiel enamorado, murió de melancolía,
mientras la indiferente Luna seguía en su lugar de siempre. Desde entonces
muchas ranas también le croan a la Luna durante la noche y, a su vez, los
vecinos contestan de la misma forma; ésta es la causa del concierto de ranas
croando que se oye cuando la Luna está en lo alto del cielo.
«Evita los amores imposibles, producen una gran tristeza.»
0.999.5 anonimo fabula
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