Translate

lunes, 4 de noviembre de 2013

El tio generoso

La familia Ardilla esperaba ilusionada la visita del tío millonario.
Este era famoso por los regalos que hacía. Las riquezas le impor-taban poco y consideraba a las personas según sus cualidades y virtudes.
-Ardillín, limpia tu cuarto -le pidió la madre al hijo más pequeño, que era bastante holgazán.
-Lo dejaré como un espejo -dijo Ardillín. Pero se tumbó en la cama soñando con los regalos que le daría su tío. Así pasó un rato hasta que le despertó la voz de su tío.
-¡Vaya, vaya! ¡As¡ que todos trabajan para darme la bienvenida y tú estás holgazaneando! ¡El que no trabaja no tiene regalo!
La hermanita de Ardillín intercedió por él.
-Perdónale, no volverá a holgazanear.
-Bueno, si tú me lo aseguras, confiaré en él -aceptó al fin el tío a regañadientes.
Desde ese día, Ardillín, agradecido a su hermana, se prometió no defraudarla.
Por supuesto, recibió un valioso regalo de su tío, como los demás, pues se lo merecía.

«Todos se deben ayudar en la familia.»

0.999.5 anonimo fabula 

No hay comentarios:

Publicar un comentario