Un Padre afligido por una
familia de Hijos pendencieros, les exhibió un atado de varas y pidió a los
jóvenes que lo rompieran. Tras repetidos esfuerzos, admitieron que les
resultaba imposible.
-Vean -dijo el Padre- las
ventajas de la unidad; mientras esas varas permanecen unidas son invencibles; y
observen lo débiles que se muestran individualmente.
Sacando una vara del
atado, fácilmente la rompió en la cabeza del Hijo mayor, y repitió el procedimiento
hasta que todos fueron servidos.
1.007.5 Briece (Ambrose)
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