Koala vive feliz trabajando sus tierras con la ayuda
de un viejo tractor. Saca suficiente para vivir y puede disfrutar de lo que más
le gusta: el sol y el campo.
Hasta que un día el pequeño tractor se estropea y deja
de funcionar. Entonces Koala se queda muy preocupado, pues no sabe cómo
solucionar su problema.
«¿Qué voy a hacer ahora?», se dice Koala. «Necesito
seguir trabajando la tierra y yo solo no puedo. ¡Ya está! Pondré un anuncio
pidiendo un ayudante.»
Al día siguiente, un toro robusto y con ganas de
trabajar se presenta en la finca de Koala. Pronto se ponen de acuerdo. Koala
tiene un ayudante, además de un amigo.
«Los problemas tienen solución. Todo es cuestión de paciencia y
serenidad.»
0.999.5 anonimo fabula,
No hay comentarios:
Publicar un comentario